En el Palacio Real de Madrid se conserva un retablo formado por quince tablillas de madera pintadas por Juan de Flandes para la reina Isabel I de Castilla. Son el resto de un total de cuarenta y siete tablillas sueltas, que representaban otros tantos asuntos de la vida de Jesucristo, que quedaron a la muerte de la reina en el año 1504. Otras doce tablillas se conservan en museos europeos y americanos. Las otras veinte al parecer se han perdido.
En la actualidad las quince tablillas están distribuídas en forma de tríptico, de manera que en la parte central hay ubicadas nueve, en columnas de a tres; y cada una de las dos alas laterales alberga una columna de otras tres.
Las tablillas son de pequeño tamaño (en torno a 21 x 16 cm cada una), y por su calidad técnica y belleza están consideradas como las piezas más delicadas de la relativamente abundante producción de Juan de Flandes, pintor que trabajó al menos entre 1496 y 1504 como pintor de cámara de la reina Isabel, y tras su fallecimiento continuó realizando trabajos importantes en distintas ciudades castellanas, destacando especialmente las tablas pintadas para el altar mayor de la catedral de Palencia. Sin embargo de su formación y su etapa anterior en Flandes, antes de ser contratado por la reina de Castilla se desconoce absolutamente todo, incluso su apellido real.
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| Imagen del retablo en su actual disposición |
Muchas gracias Vicent por mostrarnos aquí las tablillas de Juan de Flandes. Es una verdadera lástima que sólo se puedan ver en una visita guiada a toda velocidad, que impide el detenimiento correspondiente. Estarían mucho mejor conservadas y más accesibles en el museo del Prado...
ResponderEliminarEn la misma sala del Palacio Real hay un retrato de un caballero que me fascinó, una pequeña tabla atribuida a Michel Sittow. He intentado encontrar alguna foto de esta obra en internet, pero me ha sido completamente imposible.
Un cordial saludo,
Edu
He visto ese retrato del que Edu habla, en una exposicion en Cracovia en el 2011 sobre tesoros del Patrimonio Nacional. Exquisito y delicado, con una minuciosidad en el detalle sorprendentes, teniendo en cuenta sus reducidas dimensiones.
EliminarSaludos
Carlos
Hola Carlos, gracias por tu comentario y disculpa el retraso en la respuesta. Como digo a los seguidores del blog, dispongo de poco tiempo, pero las observaciones que hacéis son de una enorme ayuda. A partir de los datos que me facilitas, he buscado en internet dicha exposición (pero ha de hacerse con el título de la misma en polaco), y he encontrado una imagen en un video de rodaje muy extraño sobre la misma. En el segundo 43, solo en ese instante, aparece la imagen del cuadro de Sittow, que es efectivamente maravilloso y yo desconocía. He podido cazar la imagen y aunque no es de gran calidad, es suficiente para incluirla en el blog en cuanto acabe esta nota. He encontrado también una segunda imagen, en una página polaca de arte, en donde la persona que comentaba la tabla (lo he traducido del polaco mediante google translator) decía que disfrutó mucho con su contemplación, porque no figuraba como un "highlight" en la publicidad de la exposición, sino que además estaba en un lugar poco destacable y pasaba desapercibido para el gran público. Desde mi punto de vista es un retrato bellísimo, y una de las joyas de la colección de primitivos flamencos de Patrimonio Nacional, que está pidiendo a gritos la elaboración de un catálogo razonado de los mismos, porque es una de las grandes colecciones existentes en el mundo, quizá no tanto por cantidad, pero sí por calidad. Agradezco mucho, por tanto, todos vuestros comentarios, que sirven para mejorar el blog. Felices fiestas.
EliminarMuchas gracias a los dos, Vicent y Carlos, estoy deseando volver a contemplar esta tabla, aunque sea en una intempestiva visita guiada... :) Y es que, compartiendo sala con el retablo de Juan de Flandes, y tan sólo cuatro minutos que te dejan para mirarlas, la frustración está servida...
EliminarEdu